La principal hipótesis que afirmamos sobre la literatura saeriana es aquella que sostiene que el autor nacido en Serodino escribió una "única historia".
El punto de partida de esta idea no es original, mucho menos reciente. De hecho, pudimos darle forma a esta idea a partir de la lectura de las palabras que expuso Ricardo Piglia en una de sus clases en la Universidad de Buenos Aires, y que fueron publicadas en formato libro hace unos pocos años, precisamente en 2016, por la editorial Eterna Cadencia.
El libro en cuestión es Las tres vanguardias. Saer, Puig, Walsh, donde Piglia dice:
El proyecto global de Saer debe ser visto como el de un narrador que intenta construir una novela en movimiento, que todavía no tiene fin, que ha definido una zona, ha puesto en ella una serie de personajes y ha empezado a contar la historia en diferentes relatos, fragmentariamente. Uno puede imaginar que su proyecto es construir, al final, con todos los libros, una sola historia que terminará por imbricar al conjunto de estas narraciones. se trata de un proyecto narrativo fragmentado, que por momentos se condensa, por momentos se expande, toma elementos secundarios de una historia y los autonomiza para convertirlos después en el centro de una novela en la que personajes secundarios de un relato anterior pasan a ocupar el primer plano.
Nadie nada nunca y La pesquisa son dos novelas que fueron publicadas en 1980 y 1994, respectivamente. Pero entre ambas hay una fuerte conexión, no solo por su geografía, por la mención o aparición de varios personajes, sino por la incidencia del paso del tiempo y de los destinos acaecidos de cada uno de ellos, especialmente de los hermanos Pichón y el Gato Garay, de Elisa, y también de Tomatis.
Por supuesto, cada libro es portador de su propia trama y del tipo de escritura. En ambas, lo político está inscripto, pero no se somete a la tentativa de lo testimonial, no es una literatura de mensaje (Nadie nada nunca), ni tampoco queda atrapado en los límites del género que lo contiene, el policial (La pesquisa).
Podemos acompañar también la lectura de las dos novelas con dos cuentos (esto es opcional; solo para dar contexto y comprobar la hipótesis) que nos permiten ampliar el sentido producido, no con la finalidad de lograr una totalidad, sino más bien la de expandir el mundo saeriano, de evidenciar que el devenir de los personajes no se agota cuando se cierran las tapas de un solo libro.
Si en La pesquisa es Pichón Garay quien nos cuenta sobre los crímenes de las ancianas de París, será en A medio borrar donde nos enteramos de su partida definitiva a Francia, y del no-encuentro para despedirse de su hermano el Gato Garay, personaje principal de Nadie nada nunca. Recepción en Baker Street es el relato que continúa la conversación en un bar, donde termina la novela La pesquisa.
Clase 1. Nadie nada nunca
En esta lectura de Nadie nada nunca intentaremos observar y pensar sobre varios puntos:
📌 Fragmentos de una vida enigmática, silenciosa y la historia de un destino trágico: el Gato Garay
📌 ¿Es posible pensar los misteriosos crímenes de los caballos como metáfora de la violencia política de los años 60 y 70 en Argentina?
📌 ¿Es Elisa portavoz de las atrocidades sufridas por las víctimas, los desaparecidos durante la última dictadura militar?
📌 Los universos de la ficción saeriana, dos mundos en contacto permanente: la ciudad y el campo
📌 ¿Una historia incompleta, fragmentaria o escrita hacia el futuro? Los sentidos producidos con la lectura de Nadie nada nunca se verán transformados en nuevas experiencias, una vez que se lean las novelas que Saer escribirá en años posteriores: Glosa (1984), La pesquisa (1996) y La grande (2004)
Clase 2. La pesquisa
Cuando apareció La pesquisa en 1994, llamó la atención que Saer hubiera escrito una novela enmarcada en lo que podemos definir como género policial. Esta idea no fue producto únicamente de una determinada lectura, sino que aparecía en el paratexto del libro. Por ejemplo, en la página 3, se presentó a la novela de la siguiente manera:
“Juan José Saer. La pesquisa. Novela policial”.
En la contratapa se ratifica la supuesta pertenencia al género y se refiere a ella en esa dirección: “Relato fascinante, aguda reflexión sobre la racionalidad, el crimen y la locura. La pesquisa es la gran novela policial de Juan José Saer”.
Sin embargo, quienes habían leído al autor, sabían que no iban a encontrarse con una historia sujeta a las reglas y convenciones del género; mucho menos a la condición más específica e importante de todas, la que tiene que ver con el interrogante:
“¿Quién es el culpable?”
Por supuesto, esta pregunta estará inevitablemente en el transcurso de la narración. Porque no se trata de romper absolutamente con el género. Pero sí es necesario aclarar que en La pesquisa habrá otros enigmas importantes por revelar, además de la identidad del asesino:
📌¿Quién cuenta la trama de La pesquisa?
📌¿Quién es el autor de la novela que está dentro de la novela, “En las tiendas griegas”?
📌¿Quiénes asesinaron a la pareja de Nadie nada nunca (1980)?
📌¿Dónde están los cuerpos?
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Bibliografía
Novelas
Saer, Juan José (1980). Nadie nada nunca. México: Siglo XXI Editores
Saer, Juan José (1994). La pesquisa. Buenos Aires. Seix-Barral
Cuentos (opcional)
Saer, Juan José (1976). "A medio borrar", en La Mayor. Barcelona. Planeta
Saer, Juan José (2000). "Recepción en Baker Street", en Lugar. Buenos Aires. Seix-Barral
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Taller de Lectura Verano Saer
Martes 11 y 18 de febrero, 20 horas. Modalidad presencial (Caballito, CABA)
Costo: 25 mil pesos. Descuento: 20% por par de inscriptos
Para más información, escribir a:
serodino@gmail.com